Luciano Galán y Daniel Maldonado restauran al San Roque de la fachada de su iglesia
- Las labores se han dividido en dos partes: intervención sobre la estructura y la policromía
- Un estudio realizado por los restauradores aproxima la obra al segundo cuarto del siglo XVIII
La Hermandad del Santo Entierro ha restaurado la imagen de San Roque que preside desde su hornacina la fachada principal de la Iglesia exconvento de la localidad. Las labores han corrido a cargo de los artistas, y hermanos de la Corporación, Luciano Galán y Daniel Maldonado. Los autores aproximan la fecha de ejecución de la Imagen en el segundo cuarto del siglo XVIII, al igual que las esculturas del retablo mayor.
La Corporación apunta que San Roque ha sido objeto de distintas intervenciones en su historia, alguna de ella no muy lejana. Los estudios realizados en la obra han puesto de manifiesto las alteraciones o detalles técnicos y constructivos que precisaban ser subsanados. La intervención se ha dividido en dos partes. La primera ha sido acerca del soporte donde la imagen no ha precisado tratamiento a nivel estructural por desprendimiento o separación de las partes constituyentes. Las actuaciones realizadas en este aspecto se han centrado en resolver la rotura en el ensamble de la pierna derecha, el ataque de xilófagos, la mutilación del dedo pulgar derecho y de parte de los ropajes. Estos han reintegrados junto a la operación de lijado de parte de la policromía anterior que embotaba el modelado y la correcta lectura de la escultura.
La segunda parte ha atendido a la policromía con la eliminación de la suciedad superficial con limpieza mecánica y química se han fijado y consolidando los pequeños levantamientos con falta de adhesión al soporte. El estucado de las lagunas con pérdida de preparación se efectuó por aplicación de material afín al de la anterior intervención –estuco sintético–, con el posterior enrasado correspondiente. La reintegración cromática en este caso ha sido integral, al no poseer la escultura ningún resto de policromía original. Con respecto a tonalidades y materiales, se han tomado como referencia las esculturas del retablo mayor, obra del segundo cuarto del siglo XVIII por su gran similitud. Por último se ha aplicado una capa de barniz de poliuretano con protección especial a los rayos UV.
La Imagen
Se trata de una escultura de bulto redondo tallada en madera de pino para hornacina mostrándose en su parte trasera completamente lisa. Presenta los atributos clásicos de peregrino acompañado por su fiel perro “Melampo”. El informe diagnóstico redactado por los restauradores aproxima la obra a las esculturas del retablo mayor, obra del segundo cuarto de siglo XVIII atribuido a Tomas Guisado «El viejo”, por comparativa estilística, tanto en los volúmenes como en las líneas de diseño.
El Santo Entierro conserva la documentación que recoge las intervenciones sobre la obra desde 1893 hasta nuestros días. De las dos más recientes, la primera fue realizada en diciembre de 1997 por varios hermanos de la Hermandad, llevándose a cabo un decapado total mediante medios mecánicos al encontrarse en total deterioro el aparejo y las capas pictóricas. Se reintegraron los volúmenes perdidos y se le realizó una nueva policromía. Entre los años 2006 y 2007 se efectuó la intervención más reciente coincidiendo con las obras de sustitución de la estructura de la cubierta del templo. En ella, se renovó en su totalidad la policromía de la restauración anterior.
Redactor de MedialTV. Presenta los programas «De Tarde en Tarde», «Nuestra Gente» y «Horizonte Cultural» en la televisión de este medio.