De Arahal al Rocío: los caminos de Pepe Jiménez

Pepe Jiménez. Imagen: MedialTV

Cuando algo gusta, lo habitual es que se persiga hasta intentar conseguirlo. Esa es la actitud que aplicó un joven de Arahal hace veinticinco años que, con el carnet recién sacado, se enteró por un amigo de que le hacía falta un tractorista para su carriola y se ofreció -sin nunca antes haberlo hecho- con tal de hacer de alguna forma el camino hasta la Aldea de El Rocío.  

Lo cierto es que hizo su primer año conduciendo en una de las primeras peregrinaciones que Marchena se lanzaba a los senderos junto a la Filial de Córdoba. Pepe Jiménez (Arahal, 1977) dice que los recuerdos de esos momentos son los más bonitos de su vida bien a pie, a caballo, de mulero o desde una cabina.

Desde aquel año para acá, una larga lista de hermandades forman ya parte de su vida rociera. Durante cuatro estuvo trabajando con mulos con la Hermandad de Huelva, una de las más señeras en la romería; también le siguió Mairena del Alcor o su acompañamiento el año en el que la Hermandad del Viso se convertía en filial y hacía su último año de camino junto a su madrina, la de Sevilla-Salvador. Además, Triana tiene un gran hueco en su vida. Aún recuerda paso a paso por las arenas el año que, junto a un amigo, lo hicieron a mochila: uno llevaba la tienda de campaña y los sacos y el otro la comida, así desde el barrio sevillano hasta la aldea onubense.

En 2019, año muy añorado por todo rociero, volvió a Marchena con su familia, de ahí tiene uno de los mejores recuerdos: su entrada en Arahal a caballo con sus hijos o en la presentación ante la Hermandad Matriz cumpliendo otro año más por los caminos. Ese fue el mismo año en el que cedió los mulos de su carreta para que el Simpecao de Osuna, la hermandad con la que lleva años haciendo el camino la corporación marciense, siguiera su camino tras un incidente.

 

Pepe y Manuel

Hablar de sus hijos para él es punto y aparte. Más orgulloso no se puede mostrar tras haber hecho con ellos su primer camino y descubrir la profunda espiritualidad que ellos emanan. El “acordarse del que sufre / y al tiempo echarle una mano”, de la sevillana de los Amigos de Gines, se cumple en Pepe y Manuel, sus dos hijos.

Pepe con sus hijos en la izquierda. A la derecha, bautizándolos en su primer camino.

Este arahalense, tras tantos caminos, invita a vivirlo fuera de tópicos porque, aunque parezca mentira, los momentos espirituales y de hermandad son los que más trascienden en la memoria.

 

Dos mil kilómetros

Este año es el segundo sin romería y los recuerdos le atraviesan el alma, a eso se le suma la distancia que en estos días lo separan de la aldea. Jiménez se dedica a la cría y doma de caballos de competición y actualmente trabaja en Friburgo (Suiza) a dos mil kilómetros de la Virgen. Justo antes de hablar con MedialTV, Pepe ha conversado con Santiago Sivianes, natural de Camas y que actualmente trabaja en Noruega. Ambos, hicieron el “camino de la lluvia” juntos con Triana mencionado anteriormente, en 2016. Como hacen desde entonces, se llaman en los días de camino para recordar todos los momentos que depararon ese Rocío y, estos dos último años, con mayor frecuencia. Todas estas anécdotas las cuenta junto a un compañero que también se ve reflejado en sus palabras, Enrique Fernández, un astigitano rociero que también pasa unos días difíciles con la memoria.

Los últimos minutos de la charla, aprovecha para mandar un saludo a sus paisanos con la esperanza de preparar con su familia su próximo camino de Arahal al Rocío.

Eugenio Jiménez L.

Redactor de MedialTV. Presenta los programas "De Tarde en Tarde", "Nuestra Gente" y "Horizonte Cultural" en la televisión de este medio.

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